Los elementos más sólidos y funcionales de nuestro día a día -una escalera o un ascensor- de pronto se vuelven inútiles o desafían la gravedad. El artista argentino Leandro Erlich nos invita a sumergirnos en esa paradoja con su exposición «La estrategia de la ilusión». La muestra no solo exhibe fragmentos arquitectónicos —escaleras que no conducen a ninguna parte o una casa que parece flotar—, sino que también opera sobre la memoria de las cosas. Cada pieza evoca lo que fue un espacio seguro, invitando a reflexionar sobre qué queda de lo cotidiano cuando la realidad, tanto íntima como colectiva, parece estar al borde del colapso.
La obra de Erlich se instala directamente sobre elementos arquitectónicos comunes para manipular la percepción. Objetos que reconocemos de inmediato -ventanas, escaleras o ascensores- pierden su función habitual y aparecen en contextos que desconciertan al espectador. El curador de esta muestra, Andrés Duprat, destaca que el artista desarticula nuestra concepción de lo real al utilizar formas familiares para crear escenarios inútiles desde un punto de vista práctico, pero cargados de fuerza poética.
Si bien la exposición aborda temas que podrían ser dramáticos, como la destrucción de un hogar o la fragilidad del entorno, la mirada de Erlich evita el tono catastrófico. En cambio, elige la vía del asombro, concentrándose en la belleza del juego y el poder de la imaginación. Sus famosas esculturas de nubes, por ejemplo, invitan a recuperar esa fascinación infantil por encontrar formas conocidas en lo etéreo. Este enfoque lúdico sintoniza directamente con el interés de Fundación Macro por acercar el arte contemporáneo a públicos jóvenes y adolescentes.
La muestra combina instalaciones a escala real con una serie de maquetas que funcionan como documentación y testimonio de obras monumentales que, por su naturaleza efímera, ya no existen.
Entre las obras a escala original, se destacan las instalaciones de ascensores (Elevator Pitch y Lift), que el curador Duprat consideró que ganan fuerza al ser exhibidas en el contexto de un edificio corporativo. También se presenta Window and Ladder – Too Late for Help, una pieza inspirada en las secuelas del huracán Katrina, que evoca el socorro que llega cuando ya no queda casa que salvar. Las populares nubes, como The Cloud – Brain, y la maqueta de la icónica piscina a la que se puede ingresar sin mojarse (Silver Pool) completan la experiencia.
A través de la manipulación arquitectónica y conceptual, Erlich invita al público a dudar de lo que ve. Su trabajo explora la capacidad de los espacios cotidianos de almacenar vivencias y concentrar historias, utilizándolos como el punto de partida para una ficción que desafía lo posible. La ilusión, para el artista, tiene una doble función: no solo engaña a la percepción, sino que, al hacerlo, nos obliga a replantearnos lo que creíamos conocer.
«La estrategia de la ilusión», de Leandro Erlich puede visitarse en la Torre Macro, Avenida Eduardo Madero 1172, Ciudad de Buenos Aires, hasta el 5 de diciembre de 10 a 18 hs. con acceso libre y gratuito.